La otitis es una infección que puede aparecer en cualquier persona si se dan las condiciones determinadas. Si quieres conocer más datos sobre la misma, te invito a leer esta estupenda guía. Así conseguirás resolver todas tus dudas.
Qué es la otitis
La otitis es una inflamación de los oídos provocada por una infección. Normalmente suele aparecer cuando se crea una concentración de líquidos importante en los canales auditivos. Este líquido puede ser seroso, en forma de pus o mucoso. Eso sí, la otitis no siempre se da con la misma intensidad, por lo que dependiendo de la intensidad con la cual se dé, la misma es más o menos molesta.
La afección más común suele ser la otitis media.
Síntomas
La otitis puede presentarte en cualquier persona, aunque si nos centramos en la otitis media, nos damos cuenta de que suele ser mucho más común entre los niños de 0 a 7 años.
Cuando una persona sufre de otitis aguda, esto puede suponer un fuerte dolor de oído, irritabilidad y en ocasiones puede llegar a provocar hasta fiebre. Pero si los síntomas son más graves, el problema puede llevar a que la persona sufra males mayores como son los mareos o vértigos, otorrea y en el peor de los casos incluso se puede llegar al punto de sufrir una parálisis facial.
No hay que olvidar que dentro del grupo de la otitis media podemos encontrar 3 tipos diferentes de otitis, las cuales pasamos a nombrar a continuación.
Otitis aguda: esta enfermedad es contagiosa y suele venir acompañada de tos y problemas en el sistema respiratorio. Hay que recordar que este tipo de otitis también se divide en esporádica o de repetición.
Otitis crónica: como en el anterior grupo, la misma se dividen en dos partes. Se llamada exudado cuando la misma tiene una duración inferior a los 3 meses, mientras que si es superior a este periodo de tiempo, recibe el nombre de superada.
Otitis subaguda: en este caso podemos ver como en este caso podemos ver presencia de exudado. El exudado es un líquido que comienza a salir del conducto donde se encuentra el contenido.
Causas
Para conocer las causas principales de la otitis, tenemos que pensar en primer lugar en la trompa de Eustaquio. Esta zona está justo entre la garganta y el oído medio. El objetivo de esta trompa es conseguir drenar de manera correcta el líquido que se da lugar en la zona del oído medio. El problema viene dado cuando este drenaje se tapona por cualquier motivo. En este caso la acumulación de líquido provoca disfunción tubárica.
Por este motivo, para conocer las causas principales de la otitis, hay que ver porque se puede obstruir la trompa de Eustaquio.
Esta obstrucción puede venir dada por un motivo extrínseco. Este problema suele venir dado por una hipertrofia adenoidea. Mientras que también se puede producir por un motivo intrínseco. En este caso, el bloqueo se produce cuando la mucosa se inflama en la zona de la trompa. Esta inflamación puede venir dada por un proceso alérgico o por una infección que se ha concentrado en la zona.
A la hora de afectar estas zonas, lo más común es que el problema sea creado por diferentes gérmenes como el haemophylus influenzae entre otros. Pero no solo pueden provocar otitis los gérmenes, sino que también las bacterias pueden ser protagonistas en este proceso de infección, sin olvidar que virus como el virus influenzae también pueden provocar problemas.
Cómo curar la otitis
Para poder saber si una persona está sufriendo realmente de otitis, el médico tendrá que mirar el oído con un otoscopio. Si el profesional puede ver zonas con burbujas de aire, líquidos en la zona trasera del tímpano o burbujas de aire en el interior del oído, esto quiere decir que estás sufriendo de otitis.
Si con la exploración anterior no es suficiente, también se pueden usar otras vías de inspección como la otoscopia neumática o la timpanometría. Es más, si el paciente cuenta con antecedentes de otras infecciones, puede que también se le someta a una audiometría.
Una vez que el especialista ha encontrado el problema será el momento de poner fin al mismo. Si se llega a la conclusión de que el dolor de oídos viene dado por una otitis media, lo más seguro es que se recete una serie de antibióticos que deberán ser tomados de 10 a 15 días. Lo importante es que el tratamiento se comience cuanto antes y sea lo más específico posible.
En ocasiones el especialista también se ve obligado a recetar al paciente descongestionantes nasales para eliminar con mayor facilidad el exceso de mucosidad y así conseguir que la infección se reduzca lo antes posible.
En los casos en los cuales la otitis aparezca de manera repetitiva, puede ser una opción quitar el tejido adenoideo hipertrófico y poner unos tubos de drenaje transtimpánicos para evitar que la otitis aparezca continuamente en el paciente.
7 remedios naturales para curar la otitis
El ajo a través de sus propiedades antiinflamatorias te ayudará a mejorar. Tritura el ajo y mézclalo con un poco de aceite de oliva caliente. Deja templar y aplica dos gotas. Haz esta operación 2 veces a día.
La manzanilla también te ayudará. En este caso tan solo tendrás que poner 3 gotas de esta infusión en el oído y dejar actuar unos 5 minutos. Como en el caso anterior, repite esta operación 2 veces al día.
El aceite de lavanda también será tu aliada. Pon un par de gotas en el oído y dejando inclinada la cabeza durante 5 minutos deja actuar. Si hay excesos elimina el líquido para evitar problemas.
Otro remedio natural es aplicar unas gotas de jugo de cebolla y aplicar con un cuenta gotas. En este caso hay que dejar actuar con el oído inclinado unos 3 minutos y solo hay que repetirlo una vez al día.
Respirar vahos de eucalipto es muy bueno. Tan solo debes cocer agua con unas hojas de eucalipto y respirar el vapor, al igual que lo haces cuando estás constipado.
El aceite esencial de té se puede aplicar en gotas al oído una vez al día para desinfectar.
2 gotas diarias de agua oxigenada en el oído te ayudarán evitar que los hongos puedan seguir creciendo en el interior del oído y a frenar el crecimiento sin control de las bacterias.
Recuerda, estos remedios úsalos con mucho cuidado ya que el oído es una parte del cuerpo muy delicada.