Las naranjas son una de las frutas más beneficiosas para la salud según los expertos. A continuación analizamos las propiedades de este cítrico y te contamos cuánta fibra tiene la naranja, cuáles son sus principales propiedades y las mejores formas de consumo para aprovechar al máximo toda la fibra y los nutrientes de las naranjas.
Cuánta fibra tiene la naranja
Según los expertos las naranjas aportan una cantidad bastante interesante de fibra, concretamente dos gramos y medio de fibra para una naranja grande. Esta fibra se encuentra presente en gran parte en la pulpa blanca que se encuentra debajo de la piel, pero también en los gajos de la naranja, con lo que es fundamental tener en cuenta la forma en que la consumimos para poder aprovechar al máximo toda su fibra y no desecharla, ya que conservar la matriz alimentaria de un alimento es fundamental para beneficiarnos de sus propiedades. La fibra de las naranjas es una fibra de tipo soluble, lo que quiere decir que retiene agua y que por tanto favorece en gran medida el tránsito intestinal, puede ayudar a disminuir la absorción de grasa y es interesante para prevenir el colesterol. Del mismo modo, al consumir la fibra de la naranja notaremos su efecto saciante, con lo que es una fruta ideal para las personas con problemas de diabetes o exceso de peso.
Propiedades de la fibra de la naranja
Entre las propiedades beneficiosas de la fibra de la naranja cabe reseñar que se trata de una fruta muy interesante para las personas que padecen problemas de diabetes y que también permite mejorar la tolerancia a la glucosa. Además, su gran aporte de fibra, que aparece en esta fruta en forma de pectina, tanto en la zona blanca de la naranja como en los gajos de ésta, permite mejorar el tránsito intestinal, ayuda a tratar y prevenir problemas de estreñimiento y limpia a la perfección el tracto intestinal. Del mismo modo, la fibra de la naranja cuenta con un efecto saciante muy interesante para ayudar a las personas que están a dieta a controlar sus ganas de comer. Además, también les ayuda al prevenir la absorción de grasa y controlar los niveles de colesterol. Según los expertos, la mejor forma de aprovechar todas las propiedades de la fibra de la naranja pasa por escoger naranjas naturales directamente de productores de cítricos como naranjasdongusto.com,
y consumir la fruta entera para poder beneficiarte de toda su fibra sin que ésta se pierda por el camino, como suele suceder cuando elaboramos un zumo y retiramos la pulpa de la fruta.
Las naranjas también cuentan con ácido cítrico analgésico y depurativo y facilitan la digestión de otros alimentos. Del mismo modo, gracias a su buena cantidad de fibra son una fruta interesante para eliminar los residuos del organismo y para estimular las principales funciones del hígado y del páncreas. Además de todos estos beneficios, la naranja también aumenta la cantidad de colesterol bueno protector, disminuyendo el malo, elimina el ácido úrico y da fluidez a la sangre y es la fruta recomendada por los expertos para detener la inflamación del organismo, así como la enfermedad silenciosa conocida como la inflamación de bajo grado que muchas más personas de las que creen padecen en la actualidad debido a una dieta pobre en nutrientes, poco movimiento y unos hábitos de vida poco saludables.
¿El zumo de naranja tiene fibra?
A la hora de aprovechar al máximo todos los beneficios de la fibra de la naranja los expertos recomiendan consumir siempre que se pueda esta fruta entera porque es la mejor manera de absorber toda la fibra y que nuestro organismo pueda beneficiarse de ella. Según estos expertos, la fibra de las naranjas se ubica tanto en la piel como en la pulpa. La parte blanca de la naranja que se ubica entre la cáscara y la pulpa también forma parte de la fibra, con lo que es fundamental retirar siempre con cuidado la cáscara para lograr eliminar la menor cantidad posible de fibra y aprovecharla mejor.
De esta forma, aunque el zumo de naranja sí tiene fibra, sin duda la cantidad es mucho menor de la que puede aportar una naranja fresca, porque con el zumo no se aprovecha la piel blanca de la naranja, y además otra gran parte de la fibra se queda en el exprimidor, perdiéndose por el camino mucha fibra natural. Si una naranja grande aporta 2,5 gramos de fibra y una naranja pequeña unos 1,8 gramos, la cantidad de fibra de un zumo de naranja no llega a los 0,5 gramos por cada 100 ml de zumo. Esto no quiere decir que no podamos disfrutar de un zumo de naranja recién exprimido de vez en cuando, pero si vamos a incluir las naranjas en nuestra rutina diaria es mejor hacerlo con la pieza entera. Además, cuando preparemos el zumo no deberíamos colarlo, porque entonces estaríamos eliminando toda la pulpa completamente.