Termómetro de galio, el mejor sustitutivo al de mercurio

Uno de los termómetros que se ha puesto muy de moda en los últimos años es el digital, aunque no todo el mundo está conforme con él puesto que cuando te intentas medir la temperatura, esta va a variar bastante, tanto si hablamos del famoso termómetro digital de “disparos” en los que no hace falta un contacto con la frente de la persona, como los que guardan cierta similitud con los clásicos de mercurio que se colocan debajo del brazo. Es por esto, que cada vez son más personas que están utilizando los termómetros de galio, uno de los mejores sustitutivos al de mercurio y en esta guía te vamos a explicar las razones por las que merece la pena apostar por estos instrumentos que te ayudarán a detectar si tienes fiebre.

¿Por qué no es recomendable usar termómetros de mercurio?

Los termómetros de mercurio estuvieron muy de moda en la juventud de muchas personas, tanto de nuestros abuelos y padres, como también en la propia, siendo el tipo de termómetro que nos viene a la cabeza cuando pensamos en esta herramienta de medición de la temperatura, sin embargo, hace un par de años se fue dejando de lado porque se había comprobado que el mercurio era un elemento muy dañino y tóxico y al tratarse de un termómetro de cristal que solía romperse con facilidad, se prefirió cambiar estos modelos por otros digitales, siendo prácticamente imposible encontrarlos en el mercado los de mercurio, a no ser que vayas a una farmacia muy antigua o incluso a un rastro de antigüedades.

Razones por las que el termómetro de galio es el mejor para medir la temperatura

Si eliminamos de la ecuación el termómetro de mercurio por ser un modelo muy tóxico y porque es casi imposible de encontrarlo en la actualidad, podemos dar con otros diferentes que se han ido fabricando pero que tienen como denominador común que son digitales. Estos pueden ser los habituales que se colocan en la axila y que debes de esperar un minuto como mucho para detectar la temperatura, aunque estos tienen la peculiaridad de que, si vuelves a colocártelo y esperar dicho tiempo, es posible que la temperatura haya variado considerablemente, algo que no debería de producirse.

Al igual que existen los de axilas, también tenemos los de oído o como hemos comentado, los que tienen aspecto de pistolas que con tan solo una pulsación sin tocar la frente te da un dato de la temperatura. El problema que tienen todos estos es que no son del todo fiables. Bien es cierto que no te van a modificar en 4 grados, pero no es la medición tan exacta como a ti te gustaría, sobre todo si hablamos de mediciones para personas que son muy adultas o enfermas o incluso en bebés. Es por este motivo, como podemos leer en esenziale.com que los termómetros de galio están cada vez más de moda y los médicos los recomiendan comprar por la precisión que tienen. El aspecto es muy similar al que podríamos encontrarnos con los de mercurio, incluso muchas personas pueden llegar a pensar que se trata de estos modelos, sin embargo el galio es totalmente seguro y su medición es precisa.

Debes recordar que con los modelos digitales tendrás que estar cada cierto tiempo cambiándoles las pilas, ya que incluso en aquellos momentos en los que no los utilices pueden terminar descargándose, sin embargo, los de galio no necesitarán ninguna batería, por lo que duran toda la vida si se tienen con un buen mantenimiento, siendo posible limpiarlos y usarlos todas las veces que haga falta. Además tienen un tamaño más compacto, siendo vendidos en la mayoría de las ocasiones en un envase para su almacenamiento.

Si lo que se quiere es una fiabilidad exhaustiva de la temperatura, ya que ves al bebé o a la persona sudar o con mal aspecto pero el termómetro digital te dice que los grados están bien, es recomendable contrastarlo con lo que te diga un termómetro de galio.

Posiblemente la única desventaja que podamos indicar sobre los termómetros de galio es que para que la medición sea completamente exacta y precisa, deberás de esperar al menos unos cuatro minutos sin moverte siempre que se realice por medio de la axila, debiendo de indicarle al menor o a la persona que esté quieto durante este tiempo, sin embargo, si se usa de manera rectal, el tiempo se va a reducir a los dos minutos, debiendo de saber que en todo momento se podrá limpiar y que podrá ser utilizado infinidad de veces sin problema alguno. Por otro lado, otra pequeña desventaja es que son de vidrio como los de mercurio y tienden a romperse, pero con el cuidado preciso podrán durar para toda la vida y sabrás con exactitud la temperatura corporal de cualquier persona.